Nos montamos al nacer en la nave de la
vida allí nos aguarda la familia original, quienes nos cuidan y ayudan para que
ese primer tramo sea grato y repleto de nuevas e interesantes vivencias,
andando el tiempo, vamos haciendo paradas e incorporando más personas, amigos
que comparten el resto del trayecto o una porción del mismo, sin embargo
algunas personas solo estarán junto a nosotros por breve tiempo pues han
terminado su viaje.
Más adelante en el camino muy
posiblemente continuamos el viaje junto a ese ser especial a quien hemos
escogido como pareja, elección que es una de las más importantes y en gran
medida puede hacer más llevadero y placentero nuestro recorrido o por el
contrario entorpecernos el panorama de manera triste y nebulosa. Elegir el
copiloto más compatible, importantísima decisión.
Habrá quienes aún están sumergidos en el
mundo hipócrita de las apariencias, y sean esclavos de todos los apegos del ego
y se han dejado seducir por el obscuro plan de los grandes intereses que
intentan aun regir en un materialismo desenfrenado, esos deberían ser simples
conocidos, pues posiblemente junto a ellos no te sientas a gusto ya que la
vibración y la energía que habita dentro de ti es muy diferente y por tanto no
hay compatibilidad espiritual, sin embargo los amigos de verdad con los que dan
tu corazón un inmenso regocijo, con quienes sientes una especie de magnetismo
especial esos son grandes bendiciones que de seguro aportan mucho bien a tu
vida, sé tu también una bendición para ellos , ayúdales, apóyales, colabora en
sus crisis dales la mano cuando lo necesiten, nunca se sabe cuando ese buen
amigo en un momento dado también pueda reciprocarte en situaciones difíciles en
medio de los altibajos de la vida.
A lo largo del camino atravesamos por una
diversidad enorme de experiencias, cuanto más largo es el viaje más lecciones
se aprenden en temas como paciencia, sabiduría, tolerancia, pero sobre todo
andar por la ruta del amor incondicional, y a su vez crecer en evolución
espiritual permitiendo así alcanzar un nivel superior de conciencia y conexión
con el Universo.
Será casi imposible transitar por la
vida sin que tropecemos con dificultades, los obstáculos son parte de ese viaje
y de ellos se derivan los grandes retos con los cuales luego de ser afrontados
ganaremos en fortaleza, también habrá quienes por no haber podido hacer la
adecuada elección de copiloto se expongan a mucho dolor, maltratos y durísimas
circunstancias, Sea cual sea el caso, solos o con alguien especial ese viaje
debe proseguir.
El viaje de la vida sigue su curso, en
el caso de haber desviado la ruta, el corazón será nuestra mejor brújula para
volver a orientarnos hacia la Luz y dirigirnos por los senderos del bien,
iremos realizando nuestra misión en la vida, no olvidemos que somos
responsables de nuestras acciones externas pero mucho más allá y sobre todo
somos responsables de cuidar y elevar nuestra alma.
Es esencial en vez de acumular equipaje
pesado , ir soltando la carga indispensable pues, poco a poco desprendernos de
todo lo que entorpece la agilidad y fluidez de lo que quede del viaje, Si
guardamos rencor, apegos del ego, ira, y todo lo negativo que tanto pesa se
hará muy difícil la mudanza, el alma necesita despojarse de ataduras
terrenales, cuanto mas liviana sea mejor así podrá elevar el vuelo llegado el
momento ya que de no ser así probablemente tengamos que quedarnos sin poder
emprender el gran viaje que nos aguarda, Crucial será la tarea de liberar el
corazón para que allí viva para siempre el amor incondicional desde donde nacen
las energías que nos pueden conectar con nuestro yo divino, en ese sublime
instante nuestro ángel estará ahí esperándonos, el nos mostrará la ruta y nos
acercara hasta el umbral del nuevo destino en donde lo material sobra , impera
la paz y la armonía y la Luz habita para siempre. Namasté
AKALISUN
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